Tres tablones de madera
Forman nuestro banco.
Aquí pasó todo.
Nuestra primera mirada,
Nuestras primeras palabras,
Nuestro primer beso.
En una noche como esta
Nos conocimos.
Tras cinco noches,
Sigo en nuestro banco.
Eres como una estrella,
Una estrella fugaz,
Mi estrella.
Aquí sigo,
En nuestro banco.
Huele a madera,
Huele a ti.
Tu olor ha quedado impregnado
En mi recuerdo,
Es dulce, igual que tus labios.
Eres como una estrella,
Una estrella fugaz.
Pasan las horas,
Siento la desesperación,
Y todo sigue igual.
Aquí sigo,
Sentada
Esperando una estrella fugaz,
Mi estrella fugaz.
Recuerdo tu olor,
Tus ojos
Y tu mirada.
El sonido de las olas
Retumba en mis oídos,
Del mismo modo
Que tus besos
Retumban en mi recuerdo.
¡Dichoso el día en que te conocí!
En este banco,
Nuestros tres tablones de madera.
Tu recuerdo nubla mi mente.
Mi cuello arde,
Mis ojos arden,
Mis labios arden,
Mi cuerpo arde por ti.
He visto una estrella,
Una estrella fugaz
Que llevaba tu nombre grabado,
Eras tú.
Tras veinte minutos,
Sigo viendo el reflejo
De nuestros encuentros.
Cada segundo vivido
Queda en el pasado.
Somos el olvido de una estrella,
Una estrella fugaz.
Tan veloz fue
Que ni un deseo pudimos pedir,
Estar juntos.
